Impacto de los Nuevos Aranceles de EE.UU. en la Carne Argentina
Argentina ha sido históricamente un exportador de carne de alta calidad, pero la reciente imposición de un arancel del 10% por parte de Estados Unidos ha generado preocupación en el sector ganadero. Según Carlos Kohn, un experto en agronegocios y asesor del mercado cárnico, esta medida podría transformar las perspectivas de un negocio que se encontraba en pleno crecimiento.
El arancel no cierra el mercado, pero sí plantea un desafío significativo para la carne argentina. Kohn señala que este cambio podría afectar la competitividad de los productores locales, quienes enfrentan costos adicionales que encarecen su producto. A pesar de que Estados Unidos permite que 20,000 toneladas de carne magra argentina ingresen con un derecho de solo 44 dólares, el costo se eleva drásticamente al aplicar el arancel del 26.4% para las exportaciones que superan esta cuota.

Consecuencias del Nuevo Escenario Arancelario
La carga impositiva que enfrentan los productores argentinos incluye el arancel del 10% y retenciones del 6.75%, lo que suma un total de 42.75% en impuestos sobre la carne exportada. Esto representa una ecuación preocupante para los ganaderos, quienes ya lidian con un tipo de cambio desfavorable.
Kohn explica que la carne argentina tiene características específicas que la hacen atractiva para el mercado estadounidense, donde el 60% del consumo es de productos procesados, como hamburguesas. Sin embargo, la nueva carga tributaria podría dejar a los productores fuera de este lucrativo mercado.
La Respuesta del Mercado Local
La situación actual del mercado de carne argentina es complicada. La decisión del presidente Donald Trump de implementar estos aranceles ha llevado a una subida de precios promedio del 36% en cortes de calidad, lo que podría dejar a Argentina fuera del circuito de exportación. La industria cárnica, que ya enfrenta dificultades, podría sufrir un golpe adicional.
Kohn enfatiza que aunque las barreras arancelarias afectan a todos los países, Argentina tiene un problema adicional: una estructura impositiva que incluye derechos de exportación que otros competidores, como Brasil y Paraguay, no tienen. Esto genera un desbalance que impacta negativamente en la competitividad de la carne argentina en el mercado internacional.
El Futuro del Asado Argentino
Con el aumento de aranceles y la posibilidad de importar carne de Brasil, que podría ofrecer precios más bajos en el corto plazo, Kohn critica esta estrategia. Asegura que la calidad de la carne brasileña no se compara con la argentina y que esta decisión podría desmoralizar a los productores locales, afectando la planificación a largo plazo que requiere la ganadería.
Ante el aumento de precios en el mercado local, se anticipa que la importación de carne no resolverá el problema. Kohn sostiene que la solución radica en esperar a que la oferta de carne aumente en los próximos meses, tras la recuperación de la sequía. Asegura que el asado argentino, a pesar de su creciente costo, es un símbolo cultural que debe ser protegido.
En resumen, la implementación de estos aranceles por parte de Estados Unidos representa un desafío significativo para la carne argentina. La necesidad de adaptarse a un mercado cambiante y a una estructura impositiva desfavorable podría poner en riesgo la posición de Argentina como proveedor de carne de calidad en el mercado global.